Hace unos días se ha estrenado Gente que viene y bah, la película está escrita por los directores de Élite, Carlos Montero y Darío Madrona; y dirigida por Patricia Font.
Gente que viene y bah, nos cuenta la historia de Bea (Clara Lago), una chica a la que todo le va bien hasta que pilla a su novio con una presentadora de la tele y tras todo eso, Bea se ve obligada a volver a su pueblo natal.
Para empezar, la trama es floja y ñoña, sin nada que aportar al cine. El guion es malo y eso que está basado en un buen libro. Y me duele decir esto porque admiro a Carlos y Darío. Toda la trama está llena de los tópicos del cine español y con momentos escasos de comicidad y otros tantos de sentimentalismo. Todo esto sin un porqué.
Durante toda la película no hay nada que te haga sonreír un poco; todo está superpuesto, planificado y no hay sorpresas ni emoción.
Cierto es que Clara Lago y Alexandra Jiménez están bien, aunque ninguna de las dos sobresale porque sus personajes son planos y ellas como actrices no pueden sacar más jugo. Quiero y no puedo.
La película tiene un ritmo ágil y, en general hay buenas actuaciones aunque algunas están muy sobreactuadas, tanto que da un poco de vergüenza.
Sabemos que la comedia española es bastante floja en general y en este caso Gente que viene y bah tiene poco que aportar al género y a la narrativa en el cine. Película para pasar un sábado y ya está, no da para más.
Aunque no todo es malo, la fotografía tipo italiana, que da frescura y alegría a la película es sublime y la música es otro punto a destacar de la película.
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