La favorita se estrenará la semana que viene en la cartelera española, la película dirigida por el griego Yorgos Lanthimos y protagonizada por la ganadora del globo de oro a mejor actriz de comedia Olivia Colman. Y el resultado es más que satisfactorio.
Ana Estuardo, reina de Inglaterra, Escocia e Irlanda, padece de gota severa y no es capaz de gobernar en plenas facultades. Es por ello que se apoya en su amiga y consejera Sarah Jennings para tomar cualquier tipo de decisión, da igual la importancia del asunto que se trate. Hasta que la prima de Sarah aparece en palacio en busca de trabajo y pone todo patas arriba. Esta es la premisa de La Favorita, que a priori parece cómica e incluso un poco absurda.
Esta farsa histórica se sostiene gracias al tridente de la película, Olivia Colman, Emma Stone y Rachel Weisz, las tres protagonista. La reina, la sustituta de la reina y la prima de la sustituta. Es uno de los aspectos más sobresalientes de la película. Durante la dos horas de película se nos plantean las relaciones de las tres protagonistas que en ningún momento se hacen pesadas y que, es más, resultan cómicas muchas de las veces.
La puesta en escena de Lanthimos es otra joya, una muy cuidada ambientación, fotografía, vestuario para una historia real que se divide en ocho capítulos, que consigue engancharte mucho hasta el final, aunque el director opte por un desenlace más ambiguo y menos convencional.
El nivel técnico es de un alarde continuo y nos sorprende con constantes planos amplios y con objetivos grandes angulares, que buscan llevarnos a las distintas aristas psicológicas de cada personaje y adentrarnos así en su mundo interior que esta maravillosamente decorado por un exterior en forma de escenario repleto de lujos.
En ningún momento se te hará pesada, te mantendrá enganchado y, posiblemente, con una sonrisa en la cara. Muy buenas actuaciones y unos aspectos técnicos brillantes.
Por ponerle una pega diré que hay errores históricos, como por ejemplo el segundo plano de los hombres. Y lo mejor sin duda su humor negro y ácido.
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