Menuda barbaridad de episodio nos ha regalado La casa del dragón, esta segunda temporada no puede ser más intensa y las escenas de los dragones más impactantes.
Atención SPOILERS. El episodio 4 de la segunda temporada de La casa del dragón ha sido una barbaridad, ya que nos ha entregado una batalla épica llena de fuego, furia y tres dragones.
Sobre todo, porque los últimos 15 minutos del episodio fueron un torbellino de acción, con tres de los personajes principales enfrentándose en una brutal pelea de dragones.
Desafortunadamente, uno de los mejores personajes de la serie ha encontrado su trágico final. Rhaenys Targaryen (Eve Best), también conocida como «La Reina que nunca fue», montó a su dragón Meleys hacia Rook’s Rest con la intención de acabar con el ejército de Criston Cole. Rhaenyra Targaryen, la verdadera reina, inicialmente planeaba ir ella misma, pero Rhaenys la persuadió de quedarse.
Rhaenys cayó en una trampa tendida por Criston Cole (Fabien Frankel), ya que Aemond (Ewan Mitchell) y su dragón Vhagar estaban escondidos en el bosque, esperando el momento oportuno para atacar. Aun así, ella podría haber sido capaz de vencer, pero todo cambia con la inesperada llegada de Aegon Targaryen (Tom Glynn-Carney) con su dragón Fuegosol.
Una batalla colosal con dragones.
La casa del dragón nos ha regalado una nueva escena que es brutal. Meleys dominó la batalla contra Fuegosol, el dragón de Aegon, pero la situación cambió cuando Aemond y Vhagar se unieron a la lucha. Vhagar, siendo el dragón más grande y poderoso, superó a los otros dos.
A pesar de la valentía de Rhaenys y Meleys, Aemond logró cumplir su objetivo. Meleys fue abatida en el aire y se estrelló contra Rook’s Rest, ocasionando una explosión que sin duda acabó con la vida de Rhaenys.
¿El destino de Aegon?
La última escena del episodio nos deja con una interrogante: ¿Aegon Targaryen ha muerto? Aparece recostado junto a Fuegosol, con los brazos cruzados sobre el pecho e inmóvil. Pero la serie de La casa del dragón sigue los eventos de los libros, por lo que sabemos que sigue vivo.
En la novela «Fuego y Sangre» de George R.R. Martin, Aegon sobrevive a este mismo conflicto. Ya que sufre graves heridas, incluyendo múltiples fracturas, y pasa un tiempo considerable convaleciente y consumiendo leche de amapola para aliviar el dolor. Mientras que su dragón Fuegosol ya no puede volar más porque tiene un ala rota.
Es probable que Aegon permanezca fuera de juego durante el resto de la segunda temporada de La casa del dragón, pero su muerte aún no es definitiva.
Este final impactante del nuevo episodio de La casa del dragón marca un punto de inflexión en la guerra civil Targaryen y deja a los espectadores con muchas preguntas sobre el futuro de los personajes. Pero lo mejor de todo es que todavía quedan muchos eventos brutales por suceder.
