Interpretando a nada más y nada menos que a Drácula, Nicolas Cage vuelve a la gran pantalla. Esta es la razón por la que aceptó el rol.
¡Nicolas Cage ha vuelto! Y de qué manera. El actor que revolucionó el cine a finales de los 80 y los 90 se desapareció del mapa mucho tiempo y quedó relegado a pequeños proyectos. Sin embargo, las sombras fueron insuficientes para la fama del sobrino de Francis Ford Coppola, quien poco a poco ha ido ingeniado su gran regreso. Renfield es el proyecto que promete colocarlo una vez más en la cima.
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En teoría, la cinta es una nueva versión del clásico de Bram Stoker, Drácula. No obstante, esta vez la trama seguirá al ayudante del conde vampiresco, quien se ve envuelto en una cómica relación de explotación laboral con su jefe, el señor de las tinieblas.
La comedia será un reflejo del injusto dominio que ejercen algunas compañías o empleadores sobre sus trabajadores o subordinados. El fondo, por supuesto, serán los elementos de la gran novela de terror. Nicholas Hoult coprotagonizará y Awkwafina también está en el reparto.
¿Por qué ser Drácula así y ahora?
Aunque es la primera vez que Cage le dé vida a Drácula, es un papel que siempre le sonó a la estrella. Pero, por qué encarnarlo hasta ahora?
«Bueno, en primer lugar, nunca me habían ofrecido Drácula, y no sé cómo le dices que no a Drácula, ¿sabes? Pero sí sé que era profundamente importante para mí que todo lo que contribuya como Drácula, tiene que estar del lado de hacer algo bien porque el personaje de Drácula se ha hecho muchas veces en el cine, y se ha hecho bien unas cuantas veces, y se ha hecho, la mayoría de las veces, mal, y no quería ir en esa dirección, especialmente porque la casa era Universal. Entonces, eso me llevó a creer que, «Está bien, veamos los que se han hecho bien, ya sabes [Frank] Langella, [Christopher] Lee, [Gary] Oldman, [Bela] Lugosi, y veamos qué hacemos. puede extruir desde: utilícelo como un punto de salto y extruya desde allí», confesó Cage.
No obstante, el histrión comenta que la experiencia de ponerse en la piel del vampiro acabó por darle una visión diferente del personaje. «Cuanto más pensaba en el personaje de Drácula, más lo veía como Amor y Exilio, una especie de adicto romántico que simboliza: puedes suplantar cualquier adicción, ya sea alcohol, heroína, sexo o lo que sea, y convertir esa sed de sangre en . Y él quiere la sangre, pero todo esto proviene de un lugar de soledad y amor no correspondido durante cientos de años, y constantemente le rompen el corazón. Así que esto es más el patetismo de Drácula por lo que he encontrado en mi análisis de su psique», agregó.
Además, intentó ser claro en cuanto a la intención de Drácula en esta historia. Si bien es un personaje legendario, no es quien debe robarse los reflectores esta vez. El intérprete parece mostrarse cómodo con esa función.
«Pero, esta película es, ante todo, una comedia, y apoyo mucho el personaje de Nic Hoult como Renfield, que es una versión muy nueva de Renfield, y que estaba haciendo. Solo estaba dando pequeñas gotas de lluvia en mis ojos, algunos pequeños momentos conmovedores, pero sobre todo estaba tratando de llenar los zapatos de apoyar a Nic Hoult, y también, ya sabes, alcanzar ese formato, que es más comedia. Aunque, Chris McKay quería golpear un poco a la audiencia, hacer que girara en un centavo donde te estás riendo un segundo y al siguiente estás gritando. Entonces él sabía, ya sabes, poner la amenaza así como el patetismo. Eso es lo que hace que la película sea tan divertida», finalizó en entrevista a Collider.
Renfield se estrenará el 14 de abril en los cines del mundo. Este proyecto marcará un nuevo capítulo en la trayectoria de Cage. Es una de las primeras comedias en las que se le ve al talento. Es clave incluir que viene de interpretarse a sí mismo en El peso del talento. Podría ser este el género que acoja al estadounidense en esta nueva etapa.
